Pangal Andrade realiza milagroso rescate a kayakista en Cajón del Maipo: pensaron que estaba muerto

El kayakista llevaba horas desaparecido en las turbulentas aguas del Río Yeso.

El deportista chileno, Pangal Andrade, a través de sus redes sociales aseguró haber protagonizado un heroico rescate en Cajón del Maipo. En sus hisotiras de Instagram, relató la  experiencia de haber salvado a un kayakista, quien se encontraba desaparecido en las turbulentas aguas del Río Yeso.

En su relato, Andrade confesó que la alerta llegó a través de su hermano, quien le avisó sobre la situación del kayakista: «Bajé corriendo, me junté con mi hermano, tiramos el kayak arriba, se subieron dos guías de cascadas y partimos hacia arriba. Me había llamado Carabineros (…) el amigo nadó con él y salió a pedir ayuda (…) y nos dijeron que se perdió hace 25 minutos».

«Lo que uno piensa es ‘vamos a rescatar un muerto’ (…) El río, cuando te caes y no te encuentran es porque te hundiste (…) te desapareces o te ahogas, muy simple. De hecho, nos llamaron hace unos meses atrás, llegamos muy tarde y la niñita que había caído ya estaba ahogada, pero este era un kayakista, así que quizás había más posibilidades», expresó Pangal.

Al llegar al lugar, notaron que el hombre perdido estaba ahí. «¡Está agarrado, allá abajo!», gritaron los guías. Con la adrenalina a tope, Pangal relató los momentos cruciales del rescate: «Corro la camioneta, agarro mi bolso, saco mi cuerda, mi hermano su salvavidas, corremos, pasamos estas matas y venía el yeso gigante… y al frente estaba el pobre agarrado de una zarzamora, llevaba como 30 minutos».

«Cuando uno pensó que iba a sacar un muerto… estaba vivo y ahí misión rescate, mi hermano se colocó el salvavidas, se amarró, Carabineros agarró la soga, yo pesco la mía, le grito que se tranquilice, la tiro con toda mi fuerza (…) mi hermano ya estaba metido en el agua», continuó relatando.

«Yo le hice un péndulo, agarrando la cuerda con fuerza, llega casi a la orilla, no alcanzó el péndulo, mi hermano salta, lo agarra, Carabineros tira la cuerda con otros chiquillos y lo sacamos a la orilla», detalló.

El rescate, según relata Pangal, fue muy emocionantes para todos: «Yo creo que se le cayeron sus lágrimas, se emocionó, salió caminando y fue un rescate muy bonito, lindo y yo lo miré y le dije ‘tienes otro día para seguir contando esta historia de vida».

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