“Van a cachar de que estoy muerta por el olor a cadáver”, fueron parte de los crudos recuerdos que la joven bailarina compartió al interior del reality de Chilevisión.
Un emotivo momento se vivió la noche de este jueves al interior de “Gran Hermano” en medio de la visita de Diana Bolocco a la casa estudio ubicada en Buenos Aires, Argentina, el que tuvo a Constanza Capelli como protagonista.
La bailarina recordó su proceso de casting para el reality de Chilevisión, donde reflexionó sobre su vida personal y las fuertes adicciones con las que debió lidiar, como el consumo de drogas.
“Llegó un punto en mi vida en el que yo igual decía ‘¿Por qué me pasan tantas cosas (malas)?’ Y después, estando acá, entiendo que todo eso pasó por algo y que también yo decía ‘¿Por qué la vida me trata tan mal?’ Y después entendí acá en este programa que es uno el que se trata mal, que uno tiene que tratarse bien, darse lindos mensajes a uno mismo, no ser tan duro y fui aprendiendo eso a tratarme bien y así crear una realidad más bonita”, comenzó relatando.
“Realmente en un punto en mi vida yo estaba muy mal y para mí es un milagro que yo esté aquí respirando, así de fuerte fue, pero estoy contenta porque siento que gracias a eso también represento a ciertas personas que también pasaron por lo mismo y que también pueden superarlo, es una lucha diaria, pero no lo cambiaría la verdad”, añadió.
“Fue una muerte lenta, no fue algo como que yo intenté de un día para otro, eso es lo que pasa con este tipo de adicciones que son lentas y silenciosas, uno lo puede cubrir y que nadie se entere. Fueron como tres años en los que realmente me estuve tratando súper mal y había momentos súper oscuros donde yo llegué a mi casa a la tina y agua fría y lloraba”, continuó Coni con su relato, asegurando que “en un momento de hecho pensé… el pensamiento más oscuro que tuve que me gustaría compartirlo con ustedes, fue que una vez estaba acostada en mi cama, vivía sola porque siempre trabajé y fui independiente, nunca le pedí dinero a mi familia y estaba acostada y me acuerdo que estaba en la sustancia y dije ‘me voy a morir acá y nadie va a cachar que estoy muerta y los vecinos van a sentir mi olor y ahí van a cachar de que yo estoy muerta, por el olor a cadáver”.
“Me iba a morir ahí de un ataque cardiaco y que nadie iba a cachar, ese rollo me pasé y me acuerdo que al toque busqué psicólogos, rehabilitación y fue así como encontré a Daniela, mi psicóloga y fue ahí que empecé a… renací, ahí empezó el Ave Fénix, fue el gesto de amor propio más bonito que pude haber hecho”, agrego la bailarina.
“Siento que me ha hecho súper fuerte y también empática con los demás, es por eso que me gustaría estudiar psicología, para poder ayudar”, concluyó en su íntima confesión al interior de “Gran Hermano”.